Leí el primer libro de Harry Potter: Pensamientos y Reacciones

Como la eterna payasa que soy, compré hace poco el primer libro de Harry Potter, y el viernes compré el segundo. Terminé el primero ayer por la mañana y, considerando el ritmo en el que iba, probablemente lo hubiese acabado en dos o tres días, pero ya saben- la vida de adulto responsable es exigente. 

Aun así, ya acabé, y tengo par de cosas que decir. No se preocupen que no son negativas; al menos la mayoría no lo son. En sí me disfruté bastante el libro. Ya es la cuarta vez que lo leo. La primera vez fue cuando estaba en segundo grado, luego en la escuela superior, más tarde en mis primeros años de universidad, y ahora como adulto y maestro. Decir que mi perspectiva ha cambiado es poco. Realmente es una travesía el volver a leer algo que leíste por primera vez a los 6 años, versus ahora a los 27. Varias cosas cambiaron, algunas se mantuvieron igual, pero de igual forma, el encanto se mantuvo siempre. 

Esta reseña no será dividida entre lo que me gustó y lo que no. Serán simplemente 10 pensamientos principales que tuve mientras leía el libro, y algunos que tuve al terminar. Espero que les guste. 

#1 La experiencia de reconectar con la infancia.

Hace unos días estaba con una mini crisis (¿cuándo no?), sobre la vida tan ajetreada que llevo. Siempre voy en piloto automático durante el día, y al llegar el momento de descanso, todo el peso del día me cae encima de la manera más destructiva posible. El leer "Harry Potter y la Piedra Filosofal" fue literalmente un respiro de alivio. Me hizo reconectar con tiempos más simples, más felices y menos dolorosos. Fue el recordarme a mí mismo la maravilla de la posibilidad, de lo inexplicable, de lo extraño. Fue la aceptación de que ser diferente y llevar una vida que otros tal vez no entiendan, está más que bien. Fue el volver a ser yo mismo sin disculpas, sin obligaciones, ni explicaciones. 

#2 Introducción a la literatura. 

Leí este libro por primera vez a los 6 años, y fue la novela que me introdujo por primera vez a lo que sería mi mayor pasión en la vida. Había leído antes, pero solo cosas cortas. Fue Harry Potter quien me hizo enamorarme de los libros, y ahora por fin entendí por qué. Poniendo aparte mis pensamientos sobre la autora, ella logró de una forma sencilla, el causar interés y maravilla en millones de niños a través de la lectura, algo que no es nada de sencillo, especialmente en un mundo como el nuestro donde estamos adictos a los celulares. Fue algo bien lindo el volver al mundo que me hizo amar los libros y a la fantasía en general. 

#3 La cantidad inmensa de detalles. 

Obviamente, al adaptar un libro al cine o a la televisión, muchas cosas se van a perder, y muchas otras van a cambiar. Eso es más que entendible. Sin embargo, la experiencia de Harry Potter de libros versus películas jamás y nunca será la misma. Este primer libro, al igual que sus secuelas, contiene tantos detalles sobre una diversidad de cosas, que realmente lo vuelve una experiencia enriquecedora. El libro explica mucho mejor una gran cantidad de temas: la muerte de Lily y James Potter; por qué Quirrell no podía tocar a Harry y en qué punto fue que empezó a usar el turbante; cómo en realidad es la escuela, desde sus uniformes hasta sus clases; las personalidades de los personajes mejor exploradas; y el verdadero abuso que sufre Harry. 

#4 Snape sigue siendo un asco de persona. 

No me malentiendan. Snape es un gran personaje, en el sentido de lo complicado que es, sus motivaciones, sus rencores, sus traumas, su amor/obsesión por Lily, y demás. Es un gran personaje, y probablemente de los más interesantes y complejos para analizar psicológicamente. Sin embargo, eso no quita que es un asco de ser humano. Sí, salvó a Harry en varias ocasiones en este primer libro. Pero como sabemos, no fue por interés genuino hacia Harry, solo por mandato de Dumbledore y por el amor que sentía por Lily. Mientras tanto, se encargaba de abusar psicológicamente a sus estudiantes, incluyendo a Harry. Entonces, se encargó de salvar físicamente al hijo de Lily, mientras destruía mentalmente al hijo de James. 

Aquí añado el abuso que tenía con Neville, las humillaciones que le hacía pasar, lo pedante que era con Hermione, y su favoritismo con Slytherin. Como maestro, Snape lo que me provoca es asco. Como persona, me provoca lástima y antipatía a veces. Y antes de que vengan donde mí a decirme que él fue abusado también, lo siento, pero eso no es excusa. Como adulto, te corresponde sanar y ser mejor persona. Lo que te hicieron no es tu culpa, pero sanar sí es tu responsabilidad. El abusar a tus estudiantes solo porque tú fuiste abusado denota lo podrido que estás por dentro. Tampoco me vengan con la excusa de que solo lo hacía porque era un doble agente. Puedes aparentar y mostrar frialdad, sin llegar a la crueldad y al abuso. Yo no apoyo gente abusiva, cruel y sádica- PUNTO. 

#5 McGonagall es la maestra perfecta. 

Créditos a kit466 en DeviantArt. 

No solo es la mejor maestra, sino que es de los pocos adultos realmente responsables en esa escuela. Es una profesora que cree en sus estudiantes, y los anima a ser mejores. Además, es estricta sin llegar a ser déspota- no como cierto maestro de pociones que no conoce el shampoo. McGonagall también es imparcial a la hora de poner disciplina, así sean estudiantes de su casa Gryffindor, demostrando aún más su justicia y vocación. Es una mujer compasiva, solo no te metas con ella ni le hagas perder la paciencia, porque no se la va a dejar montar. 

#6 Los Dursleys son más abusivos de lo que recordaba. 

Antes simplemente veía a esta familia como mala o estúpida. No es hasta ahora que realmente me doy cuenta al nivel de abuso físico, mental y emocional al que llegaron con Harry. El mantener a un niño viviendo en una alacena bajo la escalera es cruel, y el no dejarlo salir por horas o días es aún peor; me recuerda un poco a lo que le hacían a Carrie White cuando la mamá la encerraba en el closet durante horas para que rezara. Aparte de eso, los Dursleys mantenían a Harry viviendo con muy poca comida, dándole solo lo suficiente para sobrevivir; el niño ya estaba bajo peso de una forma bastante alarmante. Además, incitaban a Dudley a pegarle, y el libro menciona cómo los Dursleys fácilmente le arrojaban con cosas para pegarle, o lo amenazaban. También están las humillaciones constantes que le hacían, desde recortarlo de forma ridícula, hasta darle la ropa vieja y exageradamente grande de Dudley. 

¿Cuán asqueroso hay que ser para hacerle esto y más a un niño? Todo por su sangre mágica y su familia. Muchas veces, la ficción imita la realidad. Digo esto porque el trato de los Dursleys hacia Harry me recuerda cómo muchos en nuestra sociedad tratan a los que son diferentes, ya sea por su sexualidad, su raza, su etnicidad, y hasta por ser brujas. Eso último no es un chiste. Los Dursleys son como esos típicos fanáticos que se refugian en sus ideas retrógradas para justificar su abuso y discrimen; hipócritas que se creen perfectos solo porque aparentan ser "normales" ante la sociedad. 

#7 La amistad lo es todo en este libro. 

Si no se da cuenta, la verdadera acción de esta novela no comienza sino hasta los últimos capítulos. Rowling realmente se tomó todo el tiempo del mundo en construir bien su universo, y en que los tres protagonistas fueran simplemente niños. Pasamos muchos capítulos viendo cómo Harry, Ron y Hermione forjan una amistad, y cómo se ajustan a esta nueva experiencia de vida lejos de casa. Además, Rowling también se tomó el tiempo de hacer que la amistad entre los tres fuese genuina, y se desarrollara de una forma natural, aún en un mundo mágico. Cerca del final del libro, Hermione expresa cómo la amistad y la valentía son más importantes que los libros o el conocimiento, reconociendo que la verdadera fortaleza está en las relaciones saludables que formamos con los demás. 

#8 No recordaba lo agridulce que era este libro. 

Harry Potter tiene un aire único de encanto y maravilla, que para mí son más fuertes en la escuela y en el Callejón Diagon. Pero, así mismo, carga con mucha tristeza. Desde la injusticia que vive Hagrid a diario y el cómo lo tratan, las humillaciones que pasa Ron por su familia ser pobre, el abuso de Harry, y el hecho de que sus padres están muertos. Fue algo bien tieste el volver a leer su escena frente al espejo Erised, que muestra lo que más anhela una persona en la vida. Y al final, cuando Hagrid visitó a Harry en la enfermería y el dio el libro con fotos de sus padres, fue algo conmovedor pero desgarrador. 

Mis respetos a Rowling en este sentido, por tocar el tema de la muerte de una forma respetuosa pero necesaria, y por enfrentar tanto a los personajes como a los lectores a nuestra inevitable mortalidad desde una temprana edad. 

#9 El sistema mágico es débil, pero adictivo. 

Como fan de la fantasía literaria, amo un sistema mágico bien construido, con sus reglas bien establecidas. El sistema mágico en Harry Potter es bien débil, en el sentido de que no tiene muchas reglas, y no es complicado de acceder. Esto tiene sus pros y sus contras, pero en este primer libro no se exploran tanto, así que no entraré en ese análisis por ahora. Sí puedo decir que es bien adictivo y fascinante y, a pesar de que he leído mejores, este tiene un encanto particular. 

#10 El libro siempre será mejor que la película. 

Las películas no son malas, pero definitivamente cada libro es mil veces mejor, incluyendo obviamente a este primero. Se siente como si la película fuese solo la punta del iceberg, y que el libro es todo lo que hay debajo de la superficie. Me alegra el no haberme quedado solo con la experiencia de la película, y haberme dado de la oportunidad de descubrir la verdadera historia; fue una experiencia maravillosa. 

En conclusión, pronto estaré terminando el segundo libro. Si me ven por ahí leyéndolo, "mind your own damn business". Pero en serio, fue algo lindo el reconectar con este mundo. Sigo pensando que hay libros de fantasía mucho mejores, pero este fue el primero, fue el que me abrió las puertas de la literatura, y por eso estoy muy agradecido. Con el paso de los libros estaré escribiendo más en detalle sobre el sistema mágico y otros elementos, pero por ahora, me quedo en lo sencillo. 

P.S. Resulta que soy Hufflepuff. Luego de leer e investigar, me alegra ser uno. 

"The Batman" sin spoilers

El pasado viernes, tuve la oportunidad de ir al cine con mi chico y, como pueden ver en el título, vimos "The Batman". Fue una experiencia cinematográfica increíble, y me atrevería a decir que ha sido de las mejores películas de este personaje, a la par con la trilogía protagonizada por Christian Bale. 

En esta corta reseña de la película, estaré dando mi opinión manteniéndome lejos de los spoilers, ya que sé que muchos todavía no la han visto. Daré un punto de vista sin entrar demasiado en los detalles, y así tratar de no arruinar su experiencia. Esta reseña, como muchas otras, la dividiré en dos partes: lo que me gustó y lo que no. Solo hubo un elemento que no fue de mi agrado, lo demás fue todo positivo. 

Ahora, sin más preámbulos, comencemos. 

I. Qué me gustó: 

1- Lado detective de Batman

En muchas otras adaptaciones de Batman, se hace demasiado énfasis en la acción y en el combate que conlleva este personaje, y se le da muy poca atención a sus habilidades como detective. Recuerdo cuando veía la serie animada de "Justice League" cuando era pequeño, que llamaban a Batman el mejor detective del mundo. Las películas que he visto de él apenas y han tocado este aspecto suyo. Sin embargo, esto cambió grandemente con "The Batman". Pudimos ver a Batman como un detective en todos los sentidos, y utilizando esto como su mayor fortaleza. Creo que fue uno de los mejores elementos de la película. 

2- Más énfasis en Selina

 Fue un verdadero deleite ver a Zoë Kravitz interpretando a Catwoman, pero aún mejor fue ver su interpretación como Selina Kyle, la mujer detrás de la villana. Pero, ¿realmente Catwoman es una villana? Esta película cuestiona grandemente esta interrogante, dándonos un lado de Selina más vulnerable, pero a la vez más oscuro. Esta película nos muestra a Selina Kyle abrazando su lado siniestro, pero sin dejarse consumir por él, y mostrando más a la mujer detrás de Catwoman. 

3- No repite las fórmulas del pasado

Ya todos sabemos quiénes son estos personajes, y sabemos muy bien cómo fue que Batman comenzó. Esta película no pierde el tiempo en enseñar la muerte de los padres de Bruce Wayne, sino que entiende que ya todos los espectadores conocemos la historia. Sin embargo, los padres de Bruce sí cumplen con una función importante en la trama; no están ahí para morir y ya. Aparte de eso, se encargaron más que antes de mostrar la compleja psicología de Batman, dejando al espectador preguntándose cuál es la verdadera máscara: el murciélago, o el joven millonario. 

4- Riddler

El villano que en español conocemos como Acertijo, fue una verdadera y mortal amenaza en esta película. Siempre lo había visto como insignificante en este universo, en parte por culpa de la película "Batman Forever" en los 90. En esa película, Riddler es mostrado básicamente como un bufón sin gracia, y no he visto la serie animada de Batman completa, por lo cual no he llegado a verlo como villano ahí. Sin embargo, en "The Batman", Riddler fue un monstruo que se quedó con el espectáculo. Usó su táctica principal, de hacer acertijos y dejar pistas para Batman, de una forma siniestra y eficaz. Los escritores del personaje y su actor realmente me hicieron ver a Riddler con nuevos ojos. 

5- Escenas de acción

A pesar de que Batman cuenta consigo una cantidad increíble de utensilios para luchar contra los villanos, esta película no abusó de eso. Hicieron más énfasis en las capacidades de Batman para luchar en el combate cuerpo a cuerpo. Claro está, el Batman en esta película apenas va comenzando en su carrera contra el crimen; no va ni tres años en su rol como Batman, por lo cual es entendible que no tenga todo el arsenal de siempre a su disposición. Pero como quiera, fue un elemento que disfruté mucho. Aparte de eso, no abusaron del uso del Batimóvil, lo cual fue igual de genial. 

6- La química entre Robert Pattinson y Zoë Kravitz: 

Los actores que interpretan a Batma y Catwoman tienen una conexión increíble entre ellos, y esto se siente en sus actuaciones. De verdad se vivieron sus personajes, y la química entre ellos era hermosa de ver. Ya dejen de juzgar a Robert Pattinson por "Twilight"; él es muy buen actor, y esta película lo terminó de comprobar. 

II. Qué no me gustó: 

1- Largo de la película

Esto es más por mi gusto personal, no tiene nada que ver realmente con la película. Es solo que no estoy acostumbrado a ver películas tan largas en el cine, y esta fueron prácticamente tres horas. A cualquier que todavía no la haya visto, le daré el mismo consejo que me dieron a mí: no beban nada, o casi nada, antes y durante la película, porque tendrán que salir al baño. La película es bastante larga, con muchos detalles en ella debido al aspecto de detective tan fuerte que tiene. Son detalles importantes que se perderían al salir de la sala, por lo cual vuelvo y les digo- bájenle dos al consumo de líquidos con esta película, y vayan con comida en el estómago. 

Bono: hay una pista importante para el final de la película que indica que vendrán otras entregas en esta historia. 

En conclusión, "The Batman" fue una película magnífica. Dense la oportunidad de verla aquellos que aún no lo han hecho, ya que les va a encantar. Espero con ansias las secuelas, que estoy más que seguro que serán igual de buenas o hasta mejores. Le doy a esta película: 

Cinco de cinco estrellas.

P.S. Me quedé con ganas de ver "Scream 5". 

Reflexión sobre una semana pesada

Ya hasta la madre. Salud 🍸

Me levanto. Me lavo la boca. Me baño. Me visto. Me arreglo la cara, porque mi rutina de piel es sagrada. Corro para el trabajo. Doy clases. Salgo. Trabajo con los perros de casa. Doy tutorías. Como algo. Me baño. Me arreglo la cara. Duermo. Y así cada día. 

Cuando dicen que la rutina mata, no están mintiendo. 

Soy capaz de manejar el estrés, pero hay días que se hace más difícil. Sé manejar la compleja soledad que viene con vivir solo, pero a veces el silencio en casa hace más ruido que una fiesta. Conozco mis herramientas para trabajar con mi depresión, pero tengo mis días que no hay herramienta que valga. Sé que estaré bien, pero a veces solo quiero estar en mi casa, acostado en mi cama mientras miro al techo y escucho música. A veces puedo con el mundo, pero a veces el mundo puede conmigo. No soy tan fuerte como trato de aparentar, ni la mitad de feliz de lo que pretendo. Hay días que fingir una sonrisa es fácil, pero hay otros donde el solo pensamiento de sonreír se vuelve una misión. 

A pesar de que tengo personas a mi alrededor que me aman, el sentimiento de soledad no se desvanece. Es como estar frente a un precipicio a punto de caer, rodeado de personas que conozco, y les grito para que me ayuden, pero nadie parece escuchar. Solo se escucha el viento, y este me dice que no me atrapará si caigo. 

De repente entre tanto caos, me pregunto si realmente estoy haciendo lo correcto con mi vida. O aún más aterrador, el pensamiento de qué cuernos estoy haciendo con mi vida. Me surgen miles de preguntas, cuestionamientos, porque veo que a veces me estoy estancando y no sé cómo salir. No tengo todas las respuestas, y tal vez nunca las tendré. Por ahora, solo intento manejarme dentro de mi confusión. 

Debe haber más en la vida que solo trabajar y pagar cuentas.

Por más que intento dar buena cara y estar motivado, se me hace más complicado cuando la mayoría de las personas que me rodean solo hablan para quejarse, encontrar un problema a todo, criticar, burlarse y atacar a otros. Me alejo, me refugio en mi espacio interior, pero llega un punto en que la negatividad se vuelve muy pesada. Llega el punto donde no sé si simplemente deseo desaparecer, o ser encontrado. 

Pero entonces, ¿encontrado por quién? La respuesta probablemente sea yo mismo, y si es así, ya estoy trabajando en eso a diario. Tal vez no lo parezca por todo lo que he escrito, pero sí trabajo en mí, y mucho. Es solo que unos días ese trabajo corre mejor que otros. 

Cumplo con mi rutina a diario, cuidando de no fallar en nada ni a nadie. Entonces me doy cuenta que me olvidé de mí. Di abrazos sin recordar que el primer abrazo me lo debía dar yo. Di sonrisas, mas no me sonreí en el espejo cuando vi mi reflejo. Di un consejo a alguien triste, mientras ignoraba mi propia tristeza. Cumplí una rutina diaria para no fallar en nada, pero me fallé a mí cuando no me puse como prioridad. Me cuidé de no lastimar a nadie con mis palabras, pero no hablaba al momento de ser lastimado por las palabras de alguien más. Ahí llega el pensamiento de por qué me cuesta tanto ser más asertivo y no dejarme pisotear por los demás. 

No soy invisible. Estoy aquí. Mi voz también vale. Mi voz también merece ser escuchada. Mi esencia también se celebra. Pero quien primero se debe dar valor, escucharse y celebrarse soy yo. Así que, mientras me recupero de una semana que me ha hecho cuestionarme hasta si realmente esto no es el matrix, me recuerdo que me debo tratar con más cariño y más amabilidad. 

Está genial ser amable con los demás, pero la amabilidad no tiene que ser mi identidad entera. Es bueno ser amable, pero no siempre tengo que serlo. Es importante ser amable, pero no a costa de mi propio bienestar y seguridad. Está bien ser yo, vulnerable, confundido todo el tiempo, perdido en mis pensamientos, frágil y fuerte a la vez. Pero también es correcto ponerme a mí mismo en primer lugar y no sacarme de ahí. No es egoísmo- es amor propio. 

Estoy asustado y soy valiente, o al menos me encuentro en un punto entremedio. Soy hermosamente fuerte, pero trágicamente confundido. No soy perfecto, aunque me hayan educado para ser así; solo soy humano, y no siempre tengo ganas de sonreír. No se trata de, "Ema estás apagado, anímate, que tú no eres así". Mi vida, si realmente piensas que Ema está haciendo chistes todo el tiempo, se nota a leguas que no conoces ni un poco de quien realmente soy. 

Todo esto me ha llevado a darme cuenta que mucha gente me toma por sentado. Casi todos a mi alrededor de hecho. Ema sonríe, canta, brinca, salta, contesta siempre el teléfono, siempre hace chistes, siempre está dispuesto a escuchar y a perdonar. Pero Ema también se cansa, y a veces Ema se cansa de ser Ema. A veces solo quiere ser Emanuelle, y más nada. Ema no siempre va a estar ahí, Ema también se cansa de estar para los demás, pero no recibir lo mismo a cambio, y Ema no siempre tiene que entender, y perdonar, y olvidar. Ema se cansa. Yo me canso. Especialmente cuando sé que, si yo hiciera la mitad de las cosas que me hacen a diario, no quisieran volver a saber de mí. 

Por eso me doy cuenta que el culpable de todo esto soy yo, por permitir que pasara en primer lugar. Me pregunto entonces en qué punto comencé a permitir tanto. En qué punto traté como prioridad a personas que solo me ven como una opción más, o un amigo más, o simplemente alguien que siempre tendrá una sonrisa para ofrecer. 

Pero se acabó. 

No me interesa realmente cuántas personas pierda. No me importa en verdad qué vaya a traer esto. Pero definitivamente es tiempo de ponerme a mí mismo como mi más importante prioridad, y al diablo lo que otros puedan pensar. No siempre tengo que ser el amable y el gentil; a veces también se vale ser la reina con corona que se rehúsa a mirar hacia abajo. 

En conclusión, porque ya me cansé de todo esto. La rutina diaria mata, pero creo que soy más fuerte. La soledad no se va, pero tal vez es cuestión de disfrutar más mi propia compañía. No es necesario que posea todas las respuestas a mis interrogantes; se vale no saber qué diablos hago. Tal vez se trata de fluir, ver qué pasa, y buscar siempre cómo vivir- no sobrevivir, sino vivir, existir a plenitud. ¿Cómo? Ni p*** idea, realmente. Solo tengo unas verdades claras: 

1- Está bien no estar bien todos los días. 

2- Se vale llorar. Eso no me hace débil. 

3- El dolor ajeno no minimiza el mío, por más fuerte que pueda ser. 

4- No vine aquí a ser perfecto. 

5- No siempre tengo que estar disponible para los demás. 

6- Las personas correctas se alegrarán por mis límites y mi asertividad. Solo debo cuidar no ser cruel, eso no me gusta. 

7- Está más que bien no caerle bien a todo el mundo. Que me odien si les da la gana. Tengo suficiente gente que me ama. 

8- Mi trabajo sí vale la pena, aunque a veces no se sienta así. 

9- A la gente hay que dejarla hacer lo que les dé la gana, pero no con uno. 

10- No necesito que me levanten cuando me caigo. Conque se queden conmigo mientras lo hago, y no me jodan, es suficiente. 

Estaré bien. Yo sé que sí. Solo fue una semana pesada, no una mala vida. Mientras me tenga a mí mismo, todo estará bien. 

P.S. Isabela Madrigal sigue siendo el mejor personaje de "Encanto" marginales.